Voluntad de creación frente a un mundo hostil

Azul María Campoy Pérez

Voluntad de creación frente a un mundo hostil

Vista de ‘Café en Royán’ y ‘Mujer peinándose’ en el Museo Picasso / Foto Azul Campoy

Invasión. Persecución. Exilio. No nos referimos a la situación en Gaza o en el Donbass, hablamos de la Francia ocupada en vida de Picasso. Hay un aparente abismo temporal y cultural, pero el lazo de la desesperanza une ambas realidades.

A lo mejor se figuran que han conquistado París… En cambio, nosotros, sin movernos de aquí, hace mucho ya que tomamos Berlín, y no creo que sean capaces de desalojarnos…”. Estas son las palabras que Jaime Sabartés recoge de la boca de Picasso, refiriéndose a las tropas alemanas cuando estas entran en Royan en el verano de 1940. Poco tiempo después, el artista abandonaría la localidad, pero no sin antes haber paseado incansablemente por sus calles, no sin antes haber tenido horas para memorizar el paisaje que enmarcaba la ventana de su taller de Les Voiliers y, por supuesto, no sin antes haber colmado sus cuadernos de dibujo con las infinitas impresiones que rondaban su mente en aquellos tiempos. Las cabezas de cordero, las corridas de toros, la morena cabellera de Dora Maar… Todo ello configura el inventario de su sentir, y los trazos de sus bocetos son las líneas en las que aquel se desborda.

Las negras paredes de la sala donde se exponen los cuadernos de Royan son cómplices de aquel periodo funesto en el que el mundo se sumía. Las curvas que conforman el espacio expositivo nos invitan a fluir silenciosamente por el recorrido y acabar descubriendo que no todo fue oscuridad en dicha etapa: el arte les sirvió de faro. Y es este mismo brillo el que emana de las obras colocadas en esta estancia: ventanas iluminadas, abiertas al microcosmos que conformó Picasso durante su estancia en Royan. Precisamente, lo que se nos ofrece es participar en la actividad del propio artista, que ha quedado detenida y guardada en el museo, siendo ejemplo de ello la paleta de colores que Picasso empleó y cuyos surcos de pintura seca son la muestra de un instante congelado. Junto con las demás piezas mostradas, configuran una magnífica colección artística que es a su vez un valioso documento histórico, pero también una singular galería de recuerdos cercenados por el curso del tiempo y dispuestos en las vitrinas.

Los cuadernos, claros protagonistas, son una entidad en sí mismos y, por su propia esencia, nos imponen el urgente deseo de pasar sus páginas. Esta necesidad se suple con las pantallas que los acompañan. Además de tener su identidad, los cuadernos desvelan los antecedentes de algunos cuadros expuestos, como ‘Mujer peinándose’ o ‘Busto de mujer con los brazos cruzados detrás de la cabeza’. Así se reitera ese flujo vital que empieza con la idea primigenia recién salida de la mente de Picasso, que luego trabaja en diferentes facetas y, definitivamente, toma forma y color en el lienzo. Las fotografías tomadas por Dora Maar inmortalizan todo ese proceso y, en un doble sentido, nos hablan de la importancia de su figura que, como podemos dar cuenta a lo largo del recorrido, es vital como retratada y como retratista.

Esta exposición es una puesta en valor del boceto, una oda al ‘disegno’, entendido no solo como el dibujo, sino como la expresión bruta del ímpetu creador del artista. De este concepto ya nos hablaba Giorgio Vasari cuatro siglos atrás y aún en la obra picassiana ocupa un papel protagonista. Aquella idea que definiría el pensamiento artístico de la modernidad, la de que el artista es capaz de superar la naturaleza mediante la proyección de las ideas que su mente alberga, trascendió a épocas y estilos. Llega incluso a ser reconocible en Picasso y en aquellas obras que nacieron en Royan. A pesar de su figuración distorsionada, a pesar de su aventurada geometrización, no deja de observar la naturaleza y pasarla por un filtro de genialidad.

La exposición: “Picasso: los cuadernos de Royan”.

Comisarios: Marilyn McCully y Michael Raeburn.

Lugar: Museo Picasso Málaga.

Fecha: Desde el 31 de enero hasta el 30 de abril de 2025.

Horario: Todos los días de 10:00 a 19:00.