Una realidad simultánea
David Aguilar Carmona
Piranesi, estampas de un visionario, en la sala noble del Museo /Foto: David Aguilar Carmona.
El Museo Carmen Thyssen Málaga ofrece la posibilidad de viajar sin pasaporte y en tiempo de pandemia mediante la selección de catorce estampas pertenecientes al Museo de Bellas Artes de Valencia.
Dicen que viajar es cambiar tu forma de mirar, pues gracias a las catorce estampas del artista Piranesi, podemos adentrarnos en la Roma romántica al igual que la aristocracia novecentista y los viajes del Grand Tour de los que la literatura humanística dieron cuenta.
Arquitecto y artista prolífico, Piranesi (1720-1778) desarrolló la sede de los Caballeros de la Orden de Malta, sin embargo, la carestía de contratos arquitectónicos le llevó a estudiar las técnicas del grabado bajo la tutela de Giuseppe Vasi. La “ciudad eterna” fue el tema de inspiración del académico que le llevó a erigirse como cronista y guía en sus vistas topográficas y arquitectónicas.
A modo de una grisalla, nuestro artista consigue una gama de tonalidades y texturas con la compleja técnica del aguafuerte, método que dominó y que se patentiza en el manejo de la punta de metal sobre la plancha, lo que determina la carga narrativa que desprende. Sus estampas pueden considerarse como un potente medio de documentación, al mantener la memoria del pasado como herencia cultural y al apostar por una representación casi cartográfica de las escenas.
En sus estampas reconocidas como caprichos, el autor se yergue como defensor del desarrollo ambiental que llega a proponer un gusto por lo teatral, con personajes de elegancia cortesana que se muestran inducidos en las escenas. Las obras de Piranesi no permanecieron aisladas, el artista contribuyó al establecimiento del neoclasicismo en Europa gracias a las imágenes que mostraban las ruinas visitadas por los viajeros de la época.
La muestra cuenta con recreaciones de la ciudad de Roma que se alza a modo de escenario, como es el caso de la obra Vista del arco de Tito (1748-1778). El artista logra captar la tercera dimensión, que a modo de ventana abierta refleja la perspectiva y profundidad. Piranesi cimienta en sus estampas con afán descriptivo los símbolos de las glorias pasadas en espacios en los que la naturaleza salvaje cobra protagonismo. Las obras muestran espacios en los que la categoría estética de la sublimidad nos arrebata emocionalmente, en un proceso dinámico que se dirime en el espectador al observar los grandes espacios de las ruinas y de la naturaleza que sobrepasa al ser humano.
En obras como Escena de tortura (1761), los trazos vibrantes y las escenas tormentosas de personajes que conviven en espacios distópicos nos inducen a una sensación de vértigo y claustrofobia. Sus prisiones muestran mundos oníricos de espacios angostos y abigarrados en los que se refleja la pérdida de límites exteriores e interiores, lo lineal se disuelve en lo inconexo, que diverge de los límites de la razón.
La exposición, comisariada por Lourdes Moreno, convida al encuentro personal en cada una de las estampas que se dan cabida en la sala más señorial del Palacio. Nos lleva a convivir e interactuar en dos realidades al sumergirnos en el universo del artista.
Las estampas carecen de cromatismo, sin embargo, sus obras dejan latente la luminosidad y virtuosismo de los venecianos como Tiepolo y Canaletto. Esto contribuye a la reflexión personal de cómo el grabado quedó relegado como arte menor en gran parte de la historia. Hasta el mes de julio la sala noble mostrará la visión de un arqueólogo e ingeniero que construyó con la total libertad de un artista.
Exposición: Piranesi, estampas de un visionario
Comisaria: Lourdes Moreno.
Lugar: Sala Noble del Museo Carmen Thyssen Málaga.
Fecha: 22 abril al 25 de julio.
Horario: martes a domingo de 10:00h a 20:00h