Tótem

Carmen Cobalea López

´Tótem Motomamy´/ Foto Carmen Cobalea

El manchego Jesús Calzada dedica esta exposición a dialogar (o rebelarse, según cómo se mire) sobre el panorama artístico actual, apoyándose para reforzar su discurso en su ya familiar conjunto de inconfundibles iconos populares y cultos.

Si se intenta explicar la exposición ‘Tótem’ del CAC de Vélez-Málaga, nos enfrentamos a una imposible síntesis en pocas palabras de aquello que Jesús Calzada pretende contar. Pasear por sus 4 salas implica una constante identificación de iconos y conceptos que te mantienen incesantemente atento, examinando e hilando unos con otros. Sólo de esta forma se puede llegar a entender una amplia narrativa que pone sobre la mesa el enfrentamiento entre las nuevas disciplinas digitales e intangibles y los elementos más tradicionales que sólo cobran sentido por su carácter material.

La constante fragmentación plástica en estos lienzos, que configura la forma de las propias obras a modo de polípticos (como ya nos adelanta el título, tótems), viene a intentar representar de una manera conceptual la esencia propiamente fragmentada del arte digital por la cual le es imposible acercarse a los límites del lienzo tradicional, como en el caso de los polémicos NFT. Así, este reconocimiento de los nuevos modelos artísticos que renuncian a la tangibilidad de las obras configura la exposición, trayéndonos pinturas de composiciones irregulares y en las que la anatomía de las figuras retratadas (con un carácter tremendamente surrealista mediante su deconstrucción) a menudo se salen de los límites del lienzo. Como el propio artista cuenta, con esta idea que explicaría estas obras de gran tamaño, consigue evocar a “la parte más primitiva del arte, volumétrica y pesada”. La representación en algunas pinturas de grandes piedras precedidas siempre por la frase “It not an NFT” es el ejemplo más explícito que podremos encontrar.

Estos recursos plásticos pero metafóricos, son intencionadamente complementados, a modo de oposición, con los temas que el artista ha elegido representar. A través del culto al cuerpo y una detallista anatomía humana (que no menos ideal), el artista parece tratar de ejercer resistencia a esa pérdida de corporalidad y humanidad del arte más actual; además de, mediante la inquietante deconstrucción de los mismos, simbolizar de algún modo el difuso y confuso papel que jugamos las personas en ese metaverso.

Este enfrentamiento entre materia y digitalización, lo refuerza incluyendo en su lenguaje estético, claramente regido por las corrientes contemporáneas, algunos de los elementos más reconocibles del “arte culto” occidental: arcos de medio punto, mujeres con iconografía de la Inmaculada, caballos alados o paños mojados. Del mismo modo, esta heterogénea propuesta comparte protagonismo con aquellos componentes castizos ya esperables para cualquiera que conozca la obra del autor: personajes icónicos como Rosalía o Camarón, sillas de mimbre o plástico, claveles o incluso sábanas secándose en su tendedero como si de cualquier patio español se tratara. Estas figuras del imaginario más popular que invaden toda la muestra, lejos de resultar repetitivas o injustificadas, toman un papel idóneo en esta temática para ayudar a alcanzar la posible respuesta a la cuestión que esta exposición plantea: la esencial diferencia entre el arte digital y el tradicional (culto o popular), es la convivencia humana con el objeto artístico que sólo la corporeidad permite y que lo convierte en identificable de forma colectiva.

Esta exposición, cargada de dispares elementos simbólicos y una fuerte intención comunicativa, consigue un resultado que ejemplifica a la perfección el carácter de su artista: un trabajo constante por encontrar un lugar a la cultura popular en las propuestas contemporáneas, sin dejar de afrontar temas variados y, como en este caso, valientes por lo complejo y controvertido. Así, en ‘Tótem’, Jesús Calzada no se amedrenta a la hora de generar un efectivo pulso entre conceptos opuestos pero igualmente similares en cuanto a la forma en la que ambos, ahora mismo, luchan por defender su hueco en el panorama cultural del siglo XXI.

La exposición: ´Tótem’

Comisario: Luis Reyes

Lugar: CAC Vélez-Málaga Francisco Hernández

Fecha: 31 de agosto – 20 de octubre

Horario: De martes a domingo de 10.00 a 14.00 y de 17.00 a 20.00 horas (domingos sólo por la mañana)