Luz, visión y espíritu

Alejandro Ocaña Fernández

Luz, visión y espíritu

Museum Jorge Rando/Foto Álvaro Pérez

Una temática recurrente en la obra del artista malagueño Jorge Rando: la Pasión de Cristo. Lejos de limitarse a ilustrar un episodio evangélico, el artista se sirve del martirio del Hijo del Hombre para definir su sentido de la espiritualidad.

En octubre de 2020, después de un obligado cierre debido a la pandemia de la Covid-19 y a una amplia reforma y ampliación de sus instalaciones, el Museum Jorge Rando reabrió sus puertas ofreciendo al visitante, a lo largo de sus diez salas, una amplísima muestra de la que, en todo caso, es una obra pictórica y escultórica casi inabarcable: la del artista malagueño que da nombre a la institución: Jorge Rando (Málaga, 1941). Cada una de las salas está dedicada a una temática diferente que bien puede ser recurrente, bien casual, a la hora de definir el caudal inspirador del artista, pero que en todo caso ilustra su inalienable adscripción a la poética neoexpresionista. Nos detenemos en la Sala número 4, aquella que contiene la exposición  “Pintura religiosa”.

Ya en marzo de 2008, el Palacio Episcopal de Málaga albergó la exposición “La Pasión en la pintura de Rando”, que comprendió más de cincuenta obras del artista. Desde años antes, varias de sus piezas escultóricas adornaban (y siguen adornando) los jardines de la catedral de Málaga, así como los de la iglesia de San Ramón Nonato, también en la capital. Con la puesta en marcha del Museum Jorge Rando en 2014, fueron muchas las ocasiones en las que la obra de temática religiosa del artista volvió a ser expuesta, si bien de manera temporal. La reciente reapertura del Museum ha supuesto que parte de esa pintura religiosa vaya a quedar definitivamente en las paredes de la institución. Cualquiera que conozca, aun superficialmente, la obra de Jorge Rando, sabe de la especial dedicación con que ha sido tratado lo religioso, en general, y lo cristiano en particular, a lo largo de su carrera. Y que es que, más allá de la religión que se profese, es decir, más allá de dogmas y catecismos, está el espíritu y es la espiritualidad y la forma en la que la misma fluye a través del hombre, la clave para entender la obra religiosa de Rando.

La obra que preside la sala, óleo sobre lienzo (una de las más llamativas características en el trabajo de Jorge Rando es la de no titular sus piezas, salvo por los nombres que, genéricamente, da a determinadas series o colecciones como “Maternidades”, “Afrika”, “Prostitución”, “Infortunios”, etc.), es una pintura de gran formato que recoge el episódico bíblico (Lucas 22:64) en el que a Jesucristo le vendan los ojos durante su martirio. Este mismo momento se recoge en otras obras (en estos casos, acuarelas) que también forman parte de la muestra y ha sido, en todo caso, un subtema recurrente en su obra religiosa. El Cristo al que se le priva de la visión es azotado y es objeto de burlas; se le priva de su condición humana para ser tratado como un objeto. Al perder la visión, pierde igualmente la conexión con la humanidad. De la misma manera, aquellos que vilipendian a Cristo también han perdido la ocasión de ver la divinidad. Es un puente roto; una oportunidad perdida para que la comunión Dios-hombre pueda ser completada. Algunos de los anónimos personajes, en óleos y esculturas de la exposición de la Sala 10 del Museum, “Infortunios”, también tienen los ojos vendados o se los cubren, llegando a dar incluso la espalda al espectador. Su infortunio les hace renunciar a la luz y la visión, y con ello pierden la espiritualidad.

En definitiva, con el Cristo de los ojos vendados, Jorge Rando lamenta la ceguera humana y su irresponsable insistencia en negar el paso al espíritu. Este es el sentido íntimo de lo religioso por parte de un artista espiritual.

La exposición: “Pintura religiosa”.

Comisaria: Vanesa Díez.

Lugar: Museum Jorge Rando.

Fecha: Indefinida.

Horario: De lunes a viernes de 10:00 a 18:00 horas y sábados de 10:00 a 14:00 horas.