Laverón en Brenan: abstracción del alma corpórea
Nerea de Dios Gómez
“Pareja Cubista” / Foto: Nerea de Dios Gómez
“Laverón en Brenan” es una muestra que exhibe las mejores piezas de Elena Laverón, una artista ceutí que, por causas del destino, acabó en una cálida y vibrante barriada de Málaga, Churriana. Su obra se compone de una fusión de pequeños bocetos a lápiz, algunas obras pictóricas y una gran serie de esculturas de cuerpos, tanto masculinos como femeninos, de composición figurativa. Su jardín fue testigo de su nacimiento artístico, donde creaba cada una de sus piezas a la vez que pulía su alma a través de cuerpos voluptuosos y cargados de sentimiento.
“Laverón en Brenan” nos muestra un viaje visual en el que podemos vislumbrar una gran cantidad de cuerpos, tanto masculinos como femeninos, tratados de una forma figurativa y volumétrica, desligándose del naturalismo. Esto se debe a que la intención de la artista era pulimentar las superficies hasta “borrar la rugosidad del alma”, queriendo simbolizar esa unión entre lo matérico y lo espiritual.
Elena Laverón nos aporta un nuevo punto de vista en sus obras, trayéndonos esa influencia africana que tanto la caracteriza ya que la artista, a pesar de haber nacido en Ceuta, se crió en tierra marroquí, donde comenzó a dar sus primeros pasos hasta convertirse en la creadora que es ahora. Hoy en día nos ofrece una visión fuera de los cánones que la sociedad establece desde tiempos inmemoriales.
Comenzando con la primera sala expositiva, nos encontramos con una serie de bocetos dispuestos en una pared roja como el terciopelo que los hace destacar aún más. Estos bocetos son visiones preliminares de lo que posteriormente se convierte en escultura. La artista da rienda suelta a su imaginación y a su propia alma mostrando cuerpos totalmente anónimos que danzan en diferentes posturas, que se funden en el propio papel de forma armónica. En esa misma sala podemos ver la transformación de esos bocetos en esculturas de bronce. Hablamos de piezas como “Hombre recostado” y “Mujer de pie con ropaje”, y también de escayola pintada en la obra “Pareja Cubista”. Estas esculturas oscilan constantemente entre la abstracción y la figuración. Nuestros ojos siguen distinguiendo esos cuerpos a pesar de estar formados por volúmenes circulares que fluyen entre sí. Y todas estas sensaciones colisionan con la última obra en la sala, “Autorretrato”. En este dibujo, la artista se refleja a sí misma de una forma más naturalista que sus esculturas, prevaleciendo también en el dibujo su lenguaje escultórico.
Posteriormente, nos adentramos en la segunda y última sala. Esta posee una mezcla de obras escultóricas y pictóricas, mostrando la versatilidad de la artista. Primero, nos encontramos con dos retratos a la izquierda titulados “Aster” y “La Paca”, dos óleos sobre papel. En el primero nos encontramos el rostro de un hombre construido a partir de colores fuertes que contrastan entre sí, como azules para las sombras y rojos en las zonas luminosas, mientras que el resto del rostro se compone de un color anaranjado, simulando la piel del personaje. En la segunda obra, “La Paca”, los colores son más oscuros, limitándose la gama cromática a colores anaranjados, verdosos y unos toques azulados que aportan algo de luminosidad. Por otra parte, la pintura “El pastor” nos traslada una vez más a la esencia de las esculturas, ya que se nos presenta una figura totalmente desproporcionada y configurada por grandes curvas que toca un instrumento, mientras que un toro se posa detrás suya. Al finalizar este recorrido, nos encontramos con la obra estrella de la exposición, “Bailarina”, una gran escultura formada por tierra artificial que representa a un gran cuerpo femenino y que, a pesar de sus volumétricas extremidades, nos da una sensación de ingravidez y fluidez extraordinarias, pareciendo que la escultura cobra vida.
La intención de Elena Laverón es transmitir esa dualidad entre lo ligero y lo pesado, el alma y lo corpóreo, queriendo “pulir las espinas del cuerpo” para darnos esa sensación de ligereza y libertad.
La exposición: “Laverón en Brenan”.
Comisariado: Alfredo Taján.
Lugar: Casa Gerald Brenan. Calle Torremolinos nº56, Churriana Málaga.
Fecha: Hasta el 26 de abril de 2024.
Horario: De miércoles a jueves de 16:00 a 21:00 y viernes de 11:00 a 14:00 y de 17:00 a 21:00.