Concierto sensitivo
Mari Carmen Conejo Arrabal
‘Dueto’ en Estudio Galería de Ignacio Del Río / Foto: Mari Carmen Conejo Arrabal
Estudio Galería de Ignacio Del Río presenta “Dueto”, una muestra que combina y relaciona las obras de Robert Harding y Maggi Harris. Colores, formas y materiales, todo un viaje sensorial que juega con la imaginación del espectador.
Un visitante, al traspasar la puerta de la galería malagueña, puede llegar a experimentar algo similar -o más bien, lo inverso- a lo que sentiría Alicia al llegar al País de las Maravillas en el cuento de Lewis Carroll. Pasamos del ruido de la calle, del bullicio, a la calma, a un espacio donde lo sensorial se multiplica, en este caso, por dos. Las esculturas de Harding, un clásico ya en el estudio, dialogan con las pinturas de Harris, ambos artistas con consolidadas trayectorias en el panorama artístico malagueño. A priori, podríamos pensar que son pocos los puntos de unión entre ambas producciones, ya que aparentemente son muy distintas. Sin embargo, al pasear por la sala y dejarse envolver por las obras, se siente esa fuerza centrípeta entre uno y otro. Los artistas se alejan de la representación, pero esto no conlleva el aislamiento de la realidad, todo lo contrario, nos invita a reflexionar sobre otras muchas cuestiones, entre ellas la propia disciplina artística.
La combinación de materiales de las piezas escultóricas nos lleva a pensar sobre las relaciones de la naturaleza (piedra) con lo industrial (acero). Sus formas, rígidas en algunos casos, con sutiles curvas en otros, se despliegan monumentalmente en el espacio de la sala. “Corchea” y “Semicorchea”, son los títulos de las esculturas y la denominación de las figuras musicales más cortas en duración. No obstante, el autor parece inmovilizarnos con ellas, obligándonos a ralentizar nuestro ritmo, a vivir una pausa en nuestras vidas.
Este fenómeno ocurre por igual en las obras pictóricas gracias a la intensidad del color. La artista utiliza pigmentos naturales para encapsular esa vibración cromática, como ocurre con el rojo sangrado o el azul índigo. Colores primitivos, que atraviesan toda la Historia del Arte y que se potencia aún más gracias a las texturas del soporte y las creadas a propósito con otros materiales como pliegues de telas. Todo un juego de sombras y luces, de planos y volúmenes, de sonido y silencio. Enmarcadas con una malla dorada que se ha convertido en un signo personal de Harris, las obras tienden a crecer hacía el exterior, transgrediendo el espacio propio de la escultura y el del espectador. Es por ello que al recorrer la estancia no podemos dejar de sentirnos atraídos por las cualidades visuales y táctiles de las obras, una especie de momento ‘sinestésico’, figura retórica que alude al intercambio de percepciones, a la mezcla entre sentidos, querer “tocar” visualmente u “oír” el pulso de las líneas pictóricas en Soneto, por ejemplo.
En definitiva, el encuentro propuesto por Ignacio Del Río funciona como un verdadero “dueto” musical. Ambos mantienen sus voces propias, pero no pierden la pista del otro. Más que hablar, se escuchan y convergen en una misma melodía. Así como la Reina de Corazones en la historia de Alicia acusaba de “matar el tiempo” al Sombrero Loco durante su interpretación musical, los artistas expuestos actúan de la misma forma en este concierto sensitivo, consiguen romper la referencia temporal. Tal vez, esta sea la clave para disfrutar de un buen recital.
Exposición: “Dueto”
Comisario: Ignacio del Río
Lugar: Galería Estudio Ignacio del Río
Fecha: 12 de noviembre al 10 de diciembre de 2021
Horario: De lunes a viernes de 17:30 a 20:30